::: Baños Sauna

La tradición de tomar “baños” de calor seco a temperaturas de entre 80 y 110 °C, en un ambiente aislado y revestido en madera que asegura la absorción de la humedad ambiente, proviene del pueblo finlandés y de los países nórdicos en general.

Pero el Sauna es mucho más que una habitación para sudar. Sus efectos preventivos, sus escasas contraindicaciones y la dicha que proporciona tomarlo, lo convierten en una inapreciable ayuda para lograr una vida más sana.


 

Al exponer el cuerpo a la acción del calor provocamos la puesta en marcha de dos mecanismos termorreguladores tales como:

1. Vasodilatación

Que generada por el uso del Sauna, logra que la sangre llegue hasta la última de las células del cuerpo, a las que alimenta, oxigena y libera de toxinas. La posterior vasoconstricción que se produce en la ducha completan el más efectivo masaje de venas y arterias

2. Transpiración

Los poros que con el calor se dilatan y luego, con la ducha, se contraen, quedan limpios logrando un natural tratamiento de belleza.


 
  • Efecto antiestrés: El calor intenso provoca embotamiento de las células nerviosas, disminuyendo los estímulos que envían al cerebro y provocando el relajamiento psíquico. Este efecto de distensión y descanso es un verdadero bálsamo para alejar los peligros del estrés ocasionado por el ritmo de vida al que estamos sometidos hoy en día.
  • Efecto desintoxicante: La vida sedentaria, el trabajo en locales cerrados, el abuso de comida, alcohol, tabaco, y la continua tensión nerviosa, hace que el organismo adolezca de un correcto riego sanguíneo en los tejidos, lo que provoca intoxicación, crecimiento del tejido adiposo y la prematura aparición de los achaques de la vejez. La estimulación a través del uso del Sauna de los ya comentados mecanismos termorreguladores, generan una completa y natural desintoxicación.
  • Efecto limpieza: El aire caliente y seco del Sauna contribuye a la limpieza de las vías respiratorias, y como mencionáramos también se logra una completa limpieza de la piel.
  • Efecto adelgazante: La repetición a intervalos regulares de las sesiones de Sauna, normalizan el metabolismo, lo que con sesiones de gimnasia y un régimen alimentario, lo hacen un magnífico tratamiento adelgazante.
  • Efecto preventivo: El Sauna representa muchas ventajas, tanto para personas con dolencias como para sanas, ya que además de la relajación física y psíquica inmediata, efectua una acción preventiva en sus organismos, con lo que se evita o retrasa la aparición de muchos trastornos.